Este cuento para niños de 6-7 años es una herramienta perfecta para abordar la ansiedad infantil, especialmente en torno a eventos especiales como la Navidad. La historia utiliza un lenguaje sencillo y ejemplos cotidianos para que los niños comprendan los pensamientos negativos y aprendan estrategias para reestructurarlos en positivos, fomentando así la resiliencia emocional.
Minilibro Una Navidad sin prisas
Lucas era un niño que amaba la Navidad, pero también le daba un poco de miedo. Cada año, pensaba que algo saldría mal: que no le gustara ningún regalo, que se olvidaran de su postre favorito o que no tuviera tiempo para jugar con sus amigos. Estos pensamientos le hacían sentir un nudo en el estómago y le quitaban la alegría a la época más mágica del año. Un día, su abuela le preguntó: «¿Por qué tienes esa cara, Lucas? La Navidad es para disfrutarla, no para preocuparse». Lucas le contó sus miedos, y su abuela le sonrió con ternura. «Mi querido Lucas, es normal que te preocupes, pero la Navidad es un momento para compartir con tus seres queridos, para reír, cantar y disfrutar de la compañía de los demás». La abuela le enseñó a Lucas un truco para calmar sus nervios: «Cuando tengas un pensamiento negativo, piensa en tres cosas positivas». Lucas respiró hondo y pensó: «Es verdad, tengo a mi familia, a mis amigos y a mi perro, que es mi mejor amigo». Lucas comenzó a aplicar el truco de su abuela. Cada vez que un pensamiento negativo le hacía sentir mal, él lo cambiaba por tres cosas positivas: «Mi familia es la mejor, la comida de Navidad está deliciosa y podré jugar con mis amigos en la nieve». Esa Navidad, Lucas se sintió más tranquilo y feliz que nunca. Se dio cuenta de que la magia de la Navidad no estaba en los regalos, sino en los momentos que compartía con sus seres queridos. ¿Cómo se sentía Lucas al principio de la Navidad? ¿Qué le aconsejó su abuela? ¿Qué truco aprendió Lucas para calmar sus nervios? ¿Qué hizo Lucas para disfrutar más de la Navidad? *** Este cuento para niños de 6-7 años es una herramienta perfecta para abordar la ansiedad infantil, especialmente en torno a eventos especiales como la Navidad. La historia utiliza un lenguaje sencillo y ejemplos cotidianos para que los niños comprendan los pensamientos negativos y aprendan estrategias para reestructurarlos en positivos, fomentando así la resiliencia emocional.
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