Mini-Cuentos : ## El ciervo y la última hoja

**Reseña educativa:** Este cuento, con personajes sencillos y una historia llena de sensibilidad, es perfecto para niños de 6-7 años. Les enseña sobre el ciclo de las estaciones y cómo los cambios, aunque a veces sean tristes, siempre traen consigo nuevas oportunidades. La metáfora de la última hoja sirve como un recordatorio para los niños de que deben dejar ir lo viejo para poder abrazar lo nuevo.

Minilibro El ciervo y la última hoja

Bruno, un ciervo con manchas blancas como la nieve, vivía en un bosque lleno de árboles altos y frondosos. Su favorito era un roble gigante que le ofrecía sombra en los días calurosos y le regalaba hojas crujientes para comer en otoño. Cada año, Bruno esperaba con emoción el otoño. Le encantaba ver cómo las hojas cambiaban de color: verdes brillantes, naranjas intensos, rojos como el fuego… ¡Era un espectáculo maravilloso! Este año, Bruno se había puesto triste. Las hojas de su roble favorito empezaban a caer. Una tras otra, iban flotando al suelo, dejando las ramas cada vez más desnudas. Bruno veía cómo el viento las arrastraba lejos, como si las llevara a un lugar desconocido. Un día, Bruno se despertó y vio que solo quedaba una hoja en el roble. Era una hoja grande, de un rojo profundo, como el fuego de una chimenea. Se aferraba con fuerza a la rama, pero el viento la hacía temblar. Bruno la observó con cariño, sintiendo una punzada de tristeza en su corazón. De repente, un fuerte viento sopló y la última hoja se desprendió del roble. Bruno la vio caer lentamente, flotando en el aire como un barco en un río. Se quedó mirándola hasta que desapareció entre los árboles. Pero, en ese momento, Bruno sintió algo nuevo. No era tristeza, sino emoción. Se dio cuenta de que el otoño, aunque traía consigo la caída de las hojas, también anunciaba la llegada del invierno. Y con el invierno, llegaría la nieve, la tranquilidad, la oportunidad de descansar y soñar con la primavera. Bruno sintió que, como la última hoja, también él debía dejar ir lo viejo para dar paso a lo nuevo. Caminó hacia el bosque, con un corazón lleno de esperanza, listo para vivir nuevas aventuras. ¿Cómo se sentía Bruno al principio del otoño? ¿Qué le pasaba a las hojas del roble? ¿Qué sintió Bruno cuando vio caer la última hoja? ¿Cómo crees que se sintió Bruno al final del cuento? **Reseña educativa:** Este cuento, con personajes sencillos y una historia llena de sensibilidad, es perfecto para niños de 6-7 años. Les enseña sobre el ciclo de las estaciones y cómo los cambios, aunque a veces sean tristes, siempre traen consigo nuevas oportunidades. La metáfora de la última hoja sirve como un recordatorio para los niños de que deben dejar ir lo viejo para poder abrazar lo nuevo.

Mini-Cuentos–el-ciervo-y-la-ltima-hoja.pdf

Zona de Descargas Recursos Educativos Gratis