Este cuento nos recuerda que el camino hacia nuestras metas también es importante y que disfrutar del presente nos permite alcanzar la verdadera felicidad. La historia nos enseña la importancia de apreciar la belleza de la naturaleza y de no dejar que la ansiedad nos ciegue ante la magia que nos rodea.
Minilibro El ciervo y la estrella
Bruno era un ciervo joven y ágil. Soñaba con llegar a la cima de la montaña más alta del bosque, donde brillaba una estrella dorada que, según contaba la leyenda, cumplía deseos. Cada mañana, Bruno se despertaba con la imagen de la estrella en su mente, ansioso por alcanzarla. Un día, Bruno se puso en marcha. Subía y subía por la montaña, saltando sobre rocas y atravesando ríos. El camino era difícil, pero Bruno no se rendía. Su corazón latía con fuerza, con ganas de llegar a la cima y pedir su deseo a la estrella. De pronto, una ardilla se le acercó y le preguntó: «¿Adónde vas tan rápido, Bruno?». «Voy a la cima de la montaña, a pedir un deseo a la estrella», respondió Bruno, sin detenerse. La ardilla sonrió: «No te olvides de disfrutar del paisaje en el camino, Bruno. La cima es hermosa, pero el camino también lo es». Bruno no le hizo mucho caso a la ardilla y siguió subiendo, pero al rato se dio cuenta de que la ardilla tenía razón. El paisaje era maravilloso: flores de colores, arroyos cristalinos y árboles con ramas que parecían manos que te invitaban a descansar. Bruno decidió sentarse un rato y disfrutar de la belleza del camino. Respiró hondo, observó las mariposas revoloteando entre las flores y escuchó el canto de los pájaros. De pronto, sintió una paz profunda en su corazón, como si la propia naturaleza le estuviera susurrando: «Disfruta del viaje, Bruno». Cuando Bruno llegó a la cima de la montaña, la estrella dorada brillaba con más fuerza que nunca. Bruno cerró los ojos y respiró profundamente, sintiendo la satisfacción de haber llegado. En ese momento, se dio cuenta de que su deseo ya se había cumplido. Había encontrado la paz y la alegría en el camino, y eso era todo lo que realmente necesitaba. ¿Por qué la ardilla le dijo a Bruno que disfrutara del camino? ¿Qué le enseñó la naturaleza a Bruno? ¿Qué hizo sentir a Bruno cuando llegó a la cima? ¿Qué crees que pediría Bruno a la estrella dorada? Este cuento nos recuerda que el camino hacia nuestras metas también es importante y que disfrutar del presente nos permite alcanzar la verdadera felicidad. La historia nos enseña la importancia de apreciar la belleza de la naturaleza y de no dejar que la ansiedad nos ciegue ante la magia que nos rodea.
Mini-Cuentos–el-ciervo-y-la-estrella.pdf
