Mini-Books El Conejo de Nieve y la Ira del Invierno
Era un día frío de invierno. La nieve caía sin parar, cubriendo todo de blanco. En una cueva bajo un árbol gigante, vivía un conejo blanco llamado Copito. Copito amaba el invierno, le encantaba jugar en la nieve con sus amigos. Pero este año, el invierno estaba de mal humor. ¡El viento soplaba tan fuerte que parecía querer arrancar los árboles de raíz! Un día, el viento hizo un gran ruido y azotó con fuerza la cueva de Copito. ¡La nieve se metió por todos lados! Copito salió corriendo, asustado, y se encontró con su amiga la ardilla, que temblaba de frío. «¡El invierno está furioso!», dijo la ardilla. «¿Qué podemos hacer?». Copito se sintió triste y enojado, no quería que su amigo pasara frío. De pronto, Copito tuvo una idea. «¡Vamos a construir un iglú!», gritó. «¡Así nadie pasará frío!». La ardilla se alegró mucho y juntas comenzaron a trabajar. Con sus pequeñas patitas, fueron juntando la nieve y formando un iglú redondo y acogedor. Cuando terminó, el iglú era tan grande que cabían todas las ardillas y conejos del bosque. El viento soplaba y la nieve seguía cayendo, pero dentro del iglú, todos estaban a salvo y calentitos. Copito y la ardilla compartieron comida y juegos. La ardilla cantó canciones y Copito contó chistes. El invierno seguía enfadado, pero ya no podían sentirlo, estaban juntos y eso los hacía felices. Al día siguiente, el sol salió por fin. El viento se calmó y la nieve dejó de caer. La primavera ya se sentía en el aire. Copito y la ardilla salieron del iglú y se encontraron con el bosque lleno de luz y color. ¡El invierno se había calmado! ¿Cómo era el invierno al principio? ¿Cómo se sentía Copito cuando la cueva se llenó de nieve? ¿Qué hicieron Copito y la ardilla para vencer el frío? ¿Cómo te sentirías tú si fueras Copito en esa situación? **Reseña:** Este cuento infantil, escrito con un lenguaje sencillo y directo, explora la temática de la ira y la empatía, mostrando cómo la unión y el apoyo mutuo pueden superar los momentos difíciles. La trama sencilla, con personajes entrañables como el conejo Copito y la ardilla, invita a los niños a reflexionar sobre la importancia de la amistad y la solidaridad, mientras que la narración evoca la belleza del invierno y la alegría de la primavera.
